Aunque son molestos, los orzuelos suelen curarse sin complicaciones, y tal vez por eso muchas personas solo se acuerdan de ellos cuando sufren uno. Por eso, desde nuestra clínica oftalmológica, queremos explicarte cómo curar un orzuelo y cómo puedes reducir el riesgo de desarrollar uno. Lo mejor es mantener unos sencillos hábitos de higiene para no tener que preguntarse de nuevo qué es un orzuelo y cómo se cura.
Qué es un orzuelo
Un orzuelo es un pequeño bulto que aparece de forma súbita en un párpado a causa de una infección. A menudo contiene pus y produce dolor.
Los orzuelos nacen en las glándulas sebáceas y se suelen dividir en orzuelos externos y orzuelos internos, según si están fuera o dentro del párpado, respectivamente.
Orzuelos externos
Los orzuelos externos son los más habituales. Aparecen en los bordes de los párpados y su curación es más rápida porque tienden a drenarse por sí mismos.
Orzuelos internos
Los orzuelos internos suelen ser más dolorosos. Se desarrollan dentro de los párpados, en el nacimiento de las pestañas. Como su drenaje es más complicado, tardan más tiempo en curarse.
¿Por qué aparecen los orzuelos?
El origen de los orzuelos está relacionado con la acumulación de gérmenes. La infección, provocada por la bacteria Staphylococcus aureus, genera un pequeño absceso en las glándulas sebáceas (Zeiss) o sudoríparas (Moll).
Estas glándulas segregan lípidos en los folículos de las pestañas que se añaden a la capa superficial de las lágrimas para ralentizar su evaporación. Las glándulas pueden verse tapadas por células muertas y sebo, lo que favorece la aparición de los orzuelos.
Cómo curar un orzuelo en un ojo
La pregunta de cómo curar un orzuelo es muy habitual, pero debes saber que los orzuelos tienden a desaparecer solos con el tiempo. Sin embargo, el drenaje del pus acelera el proceso y reduce las molestias.
Aliviar los síntomas, mantener la zona limpia y drenar el pus son los tres objetivos principales para quien se pregunte cómo puedo curar un orzuelo. Los tres se pueden abordar al mismo tiempo. Por ejemplo, aplicando compresas húmedas con agua tibia entre cinco y diez minutos unas tres o cuatro veces al día.
El oftalmólogo puede recetar analgésicos, cremas o gotas si hay dolor, ardor en el ojo o molestias severas. Si la curación no progresa o si la infección se extiende fuera del párpado, se pueden prescribir antibióticos e incluso realizar una leve intervención con un bisturí.
En todo caso, no intentes reventar el orzuelo. Para tratarlo te recomendamos pedir cita en nuestra Clínica Oftalmológica Dr. Nebro, donde te ofreceremos la mejor solución con todas las garantías.
La aplicación de IPL (luz pulsada intensa) en los párpados ha demostrado su eficacia en el tratamiento de los orzuelos y blefaritis mejorando el funcionamiento de las glándulas palpebrales,
¿Se pueden prevenir los orzuelos?
Hay una serie de factores de riesgo que debes considerar si quieres reducir la posibilidad de desarrollar un orzuelo en el ojo. Podemos distinguir dos tipos: los hábitos de vida perjudiciales y la infección por contacto.
La privación o mala calidad del sueño y la alimentación deficiente son dos factores relacionados con los hábitos que perjudican la salud ocular. Es conveniente cuidar el descanso y seguir una alimentación equilibrada.
Para reducir los riesgos de infección, hay que vigilar todo aquello que suponga el contacto directo con los ojos. Dos recomendaciones básicas son no utilizar cosméticos después de su fecha de caducidad y retirar el maquillaje de los párpados justo antes de acostarse.
Además, en el caso de utilizar lentillas, es conveniente desinfectarlas antes de colocarlas y hacerlo con las manos bien limpias.
Otro cuidado básico es no compartir las toallas que utilizan otras personas, en especial si tienen un orzuelo. En el domicilio es más fácil controlar este aspecto, pero en los lugares de trabajo o espacios públicos siempre es mejor utilizar toallas de papel.
No puede haber una prevención eficaz si no se observan las normas básicas de higiene, como la de no tocarse los ojos sin haberse lavado las manos. También se deben limpiar con regularidad los objetos que más se manipulan a lo largo del día: teléfono móvil, pantallas de los dispositivos táctiles, teclados, ratones, etc.
Ya ves que la higiene ocular es la clave principal a la hora de plantearse cómo curar un orzuelo. Pero para que lo veas todo más claro, en el blog de la Clínica Oftalmológica Dr. Nebro tenemos muchos artículos que te pueden interesar para cuidar tu salud visual.
