La jaqueca ocular o migraña ocular es un tipo de cefalea que suele afectar solo a un lado del cráneo, con síntomas visuales y un dolor que se localiza en la zona periocular (a veces en una extensión mayor).
Pese a no ser peligrosa, dependiendo de la frecuencia de los episodios, puede llegar a ser frustrante e incapacitante. Por eso, si hay síntomas adicionales a los que vamos a ver, o siempre que los tratamientos recomendados no surtan efecto, es necesario consultar con un oftalmólogo capaz de hacer diagnósticos complejos, como los que componen la Clínica Oftalmológica Nebro, y con un neurólogo.
¿Qué es la jaqueca ocular y sus síntomas?
La jaqueca ocular es un tipo de migraña con aura, es decir, una cefalea característica, causada por la inflamación temporal de algunos nervios, que suele manifestarse desde unos 15 o 20 minutos antes del comienzo del dolor, con síntomas visuales.
Dentro del grupo de las migrañas, al hablar de migraña oftálmica nos referimos a aquellas en las que la zona dolorida se limita a la zona periocular o la incluye.
Como oftalmólogos, no podemos dejar de advertir sobre las posibles causas del dolor de ojos. A veces, no se trata de una migraña, pese a ser lo más frecuente. Ante el primer episodio, aunque creamos que es una migraña, hemos de acudir al médico de inmediato para que nos valore y nos indique cuándo consultar con un especialista de urgencia.
Los síntomas frecuentes de la jaqueca oftálmica son los que vamos a enumerar. Ten en cuenta que no tienen por qué darse todos en un mismo episodio:
- Escotomas borrosos o centelleantes.
- Pérdida de visión, generalmente parcial, que afecta a un solo ojo. Ese ojo coincide con el lado donde se va a manifestar el dolor.
- Dolor ocular o sensación de dolor justo tras el o los ojos (en algunos casos, la migraña puede afectar a ambos lados del cráneo a la vez).
- Fotofobia y fonofobia. La exposición a luz intensa o ruidos puede aumentar los síntomas oculares y el dolor, así como producir náuseas.
¿Cuáles son las causas de la migraña oftálmica y su prevención?
La causa fisiológica de la jaqueca ocular es la inflamación de determinados nervios, o su compresión temporal por un cambio en el tamaño de los vasos sanguíneos que discurren de forma paralela a esos nervios. Pero los detonantes de las jaquecas oftálmicas pueden ser varios, y a estos también los llamamos causas:
- Estrés mantenido.
- Falta de sueño.
- Predisposición genética.
- Reacciones a ciertos medicamentos.
- Exposición a luces intermitentes, que pueden parpadear tan rápido como para no percatarnos.
- Cambios hormonales.
- En algunos pacientes, la ingesta de determinados alimentos como el queso y el chocolate.
Algunas enfermedades pueden cursar con migraña ocular como un síntoma más:
- Depresión.
- Epilepsia.
- Lupus.
- Anemia de células falciformes.
- Alguna otra alteración neurológica.
- Hay jaquecas oculares que aparecen como consecuencia de espasmos en los vasos sanguíneos, tras una crisis de ansiedad, por ejemplo.
- En unos pocos casos, el desencadenante podría ser un tumor con unas localizaciones concretas, benigno o maligno.
Cómo se trata la jaqueca ocular
Reposo
Lo más efectivo para superar un episodio de jaqueca ocular es poder recostarse a oscuras en una habitación silenciosa y, si es posible, fresca.
Cuando esto no es posible, intenta evitar la exposición a fuentes de luz intensas, incluyendo pantallas de dispositivos digitales, y evita los ambientes ruidosos. Aplica estas medidas desde el momento en el que comienzan los síntomas visuales o aura migrañosa.
Estilo de vida
Intentaremos controlar todos los factores posibles, manteniendo una buena higiene de sueño, tratando la ansiedad o la depresión y eliminando los alimentos sospechosos de la dieta, al menos durante unos meses (después iremos probando a reintroducir esos alimentos de uno en uno).
Fármacos
Los episodios pueden durar desde una hora hasta dos o tres días consecutivos. En ocasiones, estos episodios se encadenan, de modo que el paciente sufre migrañas oculares a diario durante una temporada.
Para ayudar a mejorar la calidad de vida de quienes sufren migrañas fuertes, y de las personas que presentan episodios con mucha frecuencia, podemos recetar fármacos analgésicos, para controlar el dolor, o antimigrañosos.
Con estos últimos, no es posible atinar a la primera, y toca ir probando un tiempo a base de ensayo y error. Algunos antimigrañosos presentan contraindicaciones importantes, por lo general en tratamientos prolongados. Por eso, muchas veces preferimos recetar un antiinflamatorio suave o un analgésico de uso común, mientras el paciente aprende a anticipar y reducir la intensidad de sus crisis.
La jaqueca ocular no es peligrosa, aunque sí molesta. A veces, es el síntoma de otras enfermedades y, cuando presenta síntomas ajenos a los habituales, podría ser algo más serio. Cuando existen dudas sobre la causa de lo que parece una migraña oftálmica, realizamos al paciente una serie de pruebas neurológicas y oftalmológicas. Si esas pruebas señalan que no hay nada raro, asumiremos que, en efecto, es una jaqueca ocular, aunque sea atípica.
